Tras 12 años de conflicto, en los que las familias y los niños y niñas sirios han sufrido violencia y se han visto obligados a abandonar sus hogares, las necesidades humanitarias en Siria son actualmente máximas, mientras que la financiación sigue disminuyendo año tras año. Los recientes terremotos del 6 de febrero no han hecho más que agravar su sufrimiento, haciéndoles más vulnerables a la explotación y los abusos.
De los 6,4 millones de niños y niñas que viven hoy en Siria, más de 2 millones están actualmente sin escolarizar, siendo el 40% niñas que corren un riesgo cada vez mayor de matrimonio infantil. Muchos de estos niños han tenido que soportar o presenciar múltiples tipos de violencia y sufrimiento y no han conocido otra cosa que la guerra.
Cuando el prolongado conflicto alcanza su duodécimo año los niños sirios corren el riesgo de volver a ser olvidados por la comunidad internacional. Por ello, World Vision publica un informe en el que describe la grave situación que viven junto a sus familias en la Siria actual, donde 13 millones de personas han huido del país o se han desplazado dentro de sus fronteras.