Cada año, más de mil millones de niños y niñas -la mitad de los niños del mundo- sufren alguna forma de violencia. La exposición a la violencia compromete el desarrollo mental y social del niño, dificulta los resultados educativos y reduce las oportunidades de obtener un empleo remunerado.
En 2017, un grupo de organismos liderados por World Vision encargó Counting Pennies, un análisis de la AOD (Ayuda Oficial al Desarrollo) para identificar cuánto se gasta la ayuda internacional para poner fin a la violencia contra los niños y niñas. Nuestra tercera ronda de este análisis (Counting Pennies III) se publicó en septiembre y descubrió que, en 2020, la AOD total destinada a acabar con la violencia era de solo 1.757.300 millones de dólares, es decir, el 0,78% de la AOD total. La cantidad gastada por menor fue de apenas 0,64 dólares, la más baja desde que comenzamos a analizar los datos en 2017.
Mientras completábamos la última ronda de Counting Pennies, también realizamos análisis separados para ver qué dinero se estaba gastando para acabar con la violencia sexual contra los niños y el matrimonio infantil en particular. Estas cifras son aún más impactantes: solo el 0,07% de la ayuda al desarrollo se destina a acabar con el matrimonio infantil. Esto, a pesar de que 23 niñas siguen casándose cada minuto, y nuestros propios datos sobre el terreno muestran un aumento del 163% en los matrimonios infantiles en los primeros 18 meses de la pandemia, en comparación con los 18 meses anteriores a marzo de 2020.